1
Era don Cayetano un viejecillo de setenta y seis años, vivaracho, alegre, flaco [...] era miope y corregía el defecto con gafas de oro montadas en nariz larga y corva. Detrás de los cristales brillaban unos ojuelos inquietos, muy negros y redondos... Leopoldo Alas "Clarín": La Regenta
2
Por el mes era de Mayo, cuando hace la calor, cuando canta la calandria y responde el ruiseñor, cuando los enamorados van a servir al amor. Romance del prisionero.
3
El paraje era severo, de adusta severidad. En el término del horizonte, bajo el cielo inflamado por nubes rojas, fundidas por los últimos rayos de sol, se extendía la cañada de montañas de la sierra, como una muralla azulado-plomiza, coronada en las cumbres por ingentes pedruscos y veteada más abajo por blancas estrías de nieve… “La Sisma” Pío Baroja
4
Érase un hombre a una nariz pegado, érase una nariz superlativa, érase una alquitara medio viva , érase un peje espada muy barbado. Era un reloj de sol mal encarado, érase un elefante boca arriba, érase una nariz sayón y escriba , era Ovidio Nasón más narizado. Érase un espolón de una galera, érase una pirámide de Egipto, las doce Tribus de narices era. Érase un naricísimo infinito, frisón archinariz, caratulera sabañón garrafal, morado y frito. Quevedo
5
Los pingüinos viven en la Antártida. Son pájaros con plumas muy pequeñas y con alas, pero no puedo volar; sin embargo, son magníficos nadadores. Les gusta el frío y comer peces. Cuando están en la tierra son tan lentos como una tortuga, pero en el agua son más rápidos que muchos peces. La parte delantera la tienen de color blanco, pero las alas, la cabeza y la espalda son negras; por lo que parece que van vestidos con un esmoquin.
6
Mi padre se llamaba Esteban Duarte Diniz, y era portugués, cuarentón [...] y alto y gordo como un monte. Tenía la color tostada y un estupendo bigote negro que se echaba para abajo. [...] Era áspero y brusco y no toleraba que se le contradijese en nada, manía que yo respetaba por la cuenta que me tenía. "La familia de Pascual Duarte", Camilo José Cela
7
Don Gumersindo [...] era afable [...] servicial. Compasivo [...] y se desvivía por complacer y ser útil a todo el mundo.. aunque costase trabajos, desvelos, fatiga, con tal que no le costase un real [...] Alegre y amigo de chanzas y burlas [...] y las regocijaba con la amenidad de su trato [...] y con su discreta, aunque poco ática...conversación [...] Nunca había tenido inclinación alguna amorosa a una mujer determinada [...] pero inocentemente, sin malicia, gustaba de todas, y era el viejo más amigo de requebrar a las muchachas... (Pepita Jimenez), Juan Valera
Créer jeu