La prosopografía y la etopeya son dos figuras literarias mediante las cuales realizamos la descripción de un personaje. La prosopografía refiere el exterior del personaje describiéndonos su morfología, sus rasgos físicos, su vestimenta, su entorno etc., podríamos resumir la prosopografía como la descripción de un personaje con respecto a lo que podemos ver de él.
La etopeya, de manera complementaria, describe la parte interna, moral, comportamental, sus gustos, sus sentimientos, etc., podríamos resumir la etopeya como la descripción de lo que no podemos ver, pero si percibir del personaje.
La incorporación de estas dos descripciones de un personaje a través del dibujo son un reto que nos ayuda a darle dimensión y posición en una historia que estemos transmitiendo. Mediante el uso de los planos de encuadre podemos traducir este recurso literario textual, en un recurso grafico que comunique tanto la prosopografía como la etopeya de nuestros personajes.