Presenciales
En las formaciones presenciales comparten tiempo y espacio docentes y alumnado. La presencialidad de ambos es exigida por la organización.
Esta clase de propuestas formativas facilita la interacción entre docente-alumno y alumnado entre sí pues conviven compartiendo un espacio físico; de esta forma se fomenta la pertenencia a un grupo.
Un ejemplo de las propuestas formativas presenciales es la escolaridad obligatoria.
La gran ventaja de esta modalidad es que permite trabajar cómodamente el clima en clase (conocimiento, aprecio, escucha), desarrollando habilidades como la apertura,la receptividad o la autoconfianza. Las emociones también encuentran su espacio en este modalidad. Se persigue con todo esto construir un ecosistema que propicie la participación y el aprendizaje.
La segunda gran ventaja, que está ligada a la anterior, es que facilita el trabajo en equipo.
La formación presencial promueve un aprendizaje significativo y fortalece las relaciones sociales.