Conocer a sus clientes.
Permitir que el cliente pueda hablar.
Ponerse en los “zapatos del cliente”, estar del “otro lado”
Amabilidad y calidad.
Saber escuchar con atención.
Capacidad del personal en el manejo de la frustración.
Conocimientos y valores empresariales, son la razón de ser de la organización.
No responder con enojo, gritos o golpes.
Capacidad de establecer una relación reciproca en el manejo de la información.
Lograr satisfacer con eficiencia y eficacia, las necesidades de nuestros clientes.