Ejemplos de diseños experimentales y no experimentales

Seleccionar dos grupos de estudiantes de la misma edad y habilidades. Uno de ellos recibiría instrucción mediante un método tradicional, mientras que el otro grupo utilizaría un enfoque basado en tecnología. Se evaluarían los resultados de aprendizaje mediante pruebas estandarizadas.

Asignar aleatoriamente a los estudiantes a dos grupos, uno que reciba retroalimentación instantánea sobre sus ensayos y otro que obtenga retroalimentación después de un período de tiempo. Medir la calidad de la escritura a través de evaluaciones objetivas.

Recopilar datos longitudinales de estudiantes a lo largo de varios años y analizar las tendencias en el rendimiento académico en relación con factores como asistencia, participación y programas educativos.

Realizar encuestas a estudiantes para evaluar su percepción del clima escolar, incluyendo aspectos como la seguridad, el apoyo del profesorado y la inclusión. Analizar los datos para identificar patrones y correlaciones.

Dividir a los estudiantes en tres grupos, cada uno expuesto a una estrategia diferente de enseñanza de ciencias (por ejemplo, aprendizaje basado en proyectos, clases magistrales y laboratorios interactivos). Evaluar el rendimiento mediante exámenes estandarizados.

Seleccionar varias cohortes de estudiantes que hayan experimentado diferentes niveles de exposición a la tecnología en su educación. Analizar los resultados académicos y comparar el rendimiento entre cohortes.

Recopilar datos sobre la participación de los estudiantes en actividades extracurriculares y su rendimiento académico. Utilizar análisis de correlación para identificar posibles relaciones entre la participación en actividades y el éxito académico.

Asignar al azar a estudiantes con dificultades en la lectura a dos grupos, uno que reciba tutoría y otro que no. Evaluar el progreso utilizando pruebas estandarizadas de lectura.