Organización en clases
Libertad
Igualdad
División de poderes
Soberanía nacional
Contrato social
El pensamiento ilustrado
Fe en el progreso
La libertad individual suponía, para los ilustrados, una dimensión de la razón que facilitaba al ser humano la posibilidad de pensar por sí mismo, lo que le otorgaba autonomía personal.
Los tres poderes del Estado (legislativo, ejecutivo y judicial) debían ser ejercidos por órganos diferentes, para garantizar un sistema político justo, libre e igualitario.
Los pensadores ilustrados consideraban que todos los seres humanos nacían en igualdad de condiciones y de derechos
Según los ilustrados, los seres humanos renuncian a su voluntad individual para someterse a las reglas establecidas por la sociedad.
Los ilustrados proponían una nueva organización social en grupos diferenciados por su riqueza (clases) y no por su nacimiento (estamentos), por lo que se oponían a la organización estamental de la sociedad.
En el pensamiento ilustrado el poder de los gobernantes no provenía de Dios, sino que residía en el pueblo y emanaba de él, que se expresaba libremente por medio del voto. Por este motivo, el gobernante debía cumplir la voluntad de la mayoría de la población
Organización social Derechos naturales Principios políticos
Los pensadores consideraban que, a través de la educación, los seres humanos podían acceder a un progreso indefinido.