¿Cómo interpreta las palabras?
¿Cómo capta la atención?
¿Qué sensaciones promete?
¿Cómo se pega el mensaje?
¿Cómo perdura en la memoria?
¿Cómo describe el producto?
Llamar la atención del receptor, ordenar un comportamiento y lograr que consuma el producto o servicio.
Transmitir el mensaje con tratamiento retórico y estilístico, es decir, utilizar lenguaje figurado u otros recursos del lenguaje para prolongar la duración del recuerdo y reforzar la relación mensaje-producto o servicio.
Nombrar el producto, informar las propiedades y sugerir las ventajas del producto, marca, idea o servicio.
Mantener y asegurar el contacto del mensaje con el receptor, mediante la repetición de mensajes redundantes.
Aclarar el significado de ciertas palabras o expresiones.
Comunicar la emoción que se supone la posesión del producto o el disfrute del servicio.