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Luis XVI convocó a una Asamblea llamada:
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incluía al resto de la población: burgueses, artesanos y campesinos, cuya fuerza de trabajo permitía producir alimentos, mercancías y demás artículos que necesitaba la nación.
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Además de los problemas económicos y financieros, la monarquía absolutista debió afrontar las críticas al sistema hechas por los ilustrados. Las ideas de libertad e igualdad promovidas por pensadores como Voltaire, Rousseau y Montesquieu influyeron en los burgueses, quienes anhelaban mayores libertades civiles y políticas.
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El reinado de Luis XVI debió endeudarse para afrontar la bancarrota del Estado a causa de los gastos por la participación de Francia en la Guerra de los Siete Años (1756-1763) y la independencia de las Trece Colonias inglesas en América. Los lujos y el despilfarro de la realeza agudizaron el problema.
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La sociedad francesa estaba dividida en tres sectores, a los que se les llamaba estados o...
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Los burgueses -comerciantes, industriales, banqueros, intelectuales y profesionales- se sentían maltratados por el Estado: entregaban una gran cantidad de impuestos, no podían participar en el gobierno y estaban sujetos a la voluntad real, pues no tenían derechos consagrados en la ley. Todas estas situaciones generaron un gran malestar entre ellos.
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La nobleza, encabezada por la realeza, vivía en la ______, alejada de las carencias que afrontaba el grueso de la sociedad. Los privilegios, los excesos y la ostentación de su estilo de vida generaron la antipatía y el resentimiento de los sectores populares.
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A diferencia de los nobles, que vivían entre lujos, los campesinos y los sectores populares permanecían en la miseria. Aunque esta situación provenía de mucho tiempo atrás, la crisis económica la agravó justamente antes del estallido revolucionario, pues el pueblo francés estaba aquejado por el hambre. Ante ello, comenzaron a suscitarse disturbios.
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La quiebra del Estado provocó el incremento de los impuestos al tercer estado en 1788. Sobrevino una crisis agrícola generada por malas cosechas y el problema se volvió insostenible. El gobierno real estaba en ruinas y el pueblo francés pasaba hambre, pues no podía siquiera costear los alimentos.
