3.
En el aprendizaje por autogestión las exigencias son autoimpuestas, las metas las traza el individuo para sí mismo, y las debe cumplir por sí mismo. En este sentido, la autogestión es un arma de doble filo, porque no teniendo una figura supervisora la tentación de ser negligente es más fuerte. Por tanto, el aprendizaje de autogestión requiere de mucha disciplina y motivación.