EL OSO CREYÓ QUE ERA UN MUÑECO DE NIEVE, PERO, CUANDO SE ACERCÓ RECONOCIÓ LOS OJOS DE SU AMIGO.
EL OSO TAPÓ A PATO CON UNA MANTA Y PIDIÓ A LA MARMOTA QUE TRAJERA CHOCOLATE CALIENTE.
AL ATARDECER, SE RECUESTAN BAJO LOS ÁRBOLES...
OSO ESTABA OCUPADO PREPARANDO UNA TORTA PARA MERENDAR...
LA CASA DE OSO SE LLENÓ DE ANIMALES DISPUESTOS A ESCUCHAR UNA HISTORIA DE FANTASMAS
AFUERA SE OÍAN UNOS PASOS SOBRE LA NIEVE.
MARMOTA PREPARÓ UN CARTEL QUE DECÍA: ¡NO MOLESTEN, NO ESTAMOS!