La buena conducta y las relaciones respetuosas eran la base sobre la que se sustentaba la relación entre los empleados, los mandos y la dirección.
Todos los empleados de la empresa tienen distintas habilidades y en función de su nivel de experiencia en el puesto pueden considerarse desde especialistas hasta generalistas.
Si un empleado recibe órdenes de distintos mandos, puede llevar a confusión y conflictos
La elevada rotación de personal puede perjudicar sensiblemente el correcto funcionamiento de la empresa, a la vez que reduce el sentimiento de seguridad de los empleados.
Fayol dispone que los empleados deben ser tratados con amabilidad y por igual
Estabilidad
disciplina
Unidad de Mando