17.
Aproximadamente, el 84% del territorio actual del país eran bosques y selvas, el 16% restante, sabanas, páramos, humedales y vegetación xerofítica. Se estima que a la llegada de los españoles las comunidades indígenas habían transformado el 5% del territorio. Más tarde, en 1750, luego del colapso demográfico provocado por el proceso de conquista y colonización, se restauraron algunas áreas, aunque otras empezaron a ser afectadas por el incremento de bovinos. Hacia 1850 y hasta 1950, se desarrolló un proceso de transformación que alcanzó cerca del 20%. A partir de entonces, hasta hoy, se ha registrado un cambio en 45 millones de hectáreas, aproximadamente, en el 40% de los ecosistemas originales (Márquez, 2003). A partir del texto, es posible concluir que: