En cuanto a la religión se introdujo el budismo, que tuvo amplia difusión, aunque se conservó la religión tradicional, llamada shinto, dedicada a rendir culto a los espíritus de la naturaleza y venerar a los ancestros.
La cultura de India es producto de la integración durante varios siglos de múltiples tradiciones, religiones e ideas de grupos originarios, invasores e inmigrantes.
Durante la Edad Media, India no sólo abarcaba el espacio geográfico que hoy lleva ese nombre, también ocupaba los territorios de los actuales Pakistán y Bangladesh.
Entre los siglos xiii y xiv, China fue dominada por los mongoles, pueblos guerreros asentados en las estepas y que conquistaron el norte de ese territorio; aunque intentaron extenderse hacia el sur, pero encontraron resistencia.
El territorio japonés está formado por cuatro islas grandes y otras de menor tamaño, lo que le permitió mantenerse a salvo de invasiones, pero también lo aisló del mundo.
Los chinos inventaron el papel, la pólvora y las primeras imprentas; además de sismógrafos, taladros para perforar el subsuelo y hornos para fundir metal.