1
Me rascan continuamente de forma muy placentera, mi voz es muy bien timbrada y mi cuerpo de madera.
2
Instrumento musical, jaranero y redondico, que todos saben tocar del virtuoso al borrico y que resulta esencial si cantas un villancico.
3
Mis caras redondas, ¡qué estiradas son! a fuerza de golpes, así canto yo.
4
Con tan sólo cuatro cuerdas, que un arco pone en acción, esta caja melodiosa te alegrará el corazón.
5
En el bosque nací, en el bosque crecí y, cuando instrumento fui, al soplar música oí.
6
En una larga abertura tengo yo mi dentadura y luego que empiezo a hablar, todas mis piezas se mueven sin poderlas yo parar.
7
Tengo un sonido tan suave, que ángeles tocan en mí; mis cuerdas acompañaron los salmos del rey David.
8
Soy brillante como el sol y con mi tubo enrollado hago de lobo feroz. ¿Quién soy?
9
Era nombre de una moneda y es nombre de un instrumento. Ambos proceden de Italia, y ambos dan mucho contento.
10
¿Cuál es el instrumento musical, completamente personal, que podemos escuchar, pero no ver ni tocar?
