Doy al cielo resplandores cuando deja de llover. Abanicos de colores que nunca podrás coger.
Como la piedra son duros, para el perro, un manjar. Sin ellos no podrías ni saltar ni caminar.
Por dentro carbón, por fuera madera. En tu estuche voy a la escuela.
Salgo todas las mañanas, por la tarde me escondo. Doy siempre luz y calor, y soy… redondo, redondo.
Como el algodón suelo en el aire flotar. A veces traigo lluvia y otras solo humedad
Vuelo de noche, duermo de día y nunca verás plumas en ala mía.
Salta y salta, y la colita le falta.
Guardada en estrecha cárcel por soldados de marfil, está una roja culebrea que es la madre del mentir.
LA LENGUA
HUESOS
EL ARCOIRIS
EL SOL
EL LAPIZ
LA NUBE
EL MURCIÉLAGO
LA RANA