Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
Tengo patas bien derechas, mas no me puedo mover, llevo a cuestas la comida y no la puedo comer.
Cuatro patas tiene, así como asiento; de ella me levanto y en ella me siento.
Una señorita de carnes muy blandas, que sin ser enferma siempre está en la cama. (La almohada)
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
Muy bonito por delante y muy feo por detrás; me transformó a cada instante, pues imito a los demás.
No pienses que es una col, o que baila el chachachá; búscala sobre tu cama, que yo te la he dicho ya
Llenos de agua, llenos de vino, sobre la mesa están y son de cristal fino.