PERMANENTE INSTANTÁNEA
PERMANENTES ÁCIDAS
PERMANENTES NEUTRAS
PERMANENTES AUTORREGULABLES
PERMANENTE INDIRECTA
PERMANENTE CLÁSICA
PERMANENTES CONVENCIONALES
MARCADOS PERMANENTES
Consiste en impregnar todo el cabello con el cosmético reductor más concentrado y proceder, seguidamente, al enrollado en los moldes. Se neutraliza sin el tiempo de pausa. Para que salga bien, la colocación de los moldes debe ser rápida y así el efecto del líquido reductor no pierde eficacia.
A pesar de dejar un cabello suave y manejable, no son permanentes muy utilizadas, porque pueden provocar irritaciones o alergias y el moldeado dura poco, y debe su nombre a que se emplean derivados del ácido tioglicólico con un pH comprendido entre 6 y 7.
Son las permanentes más utilizadas, porque se consigue un moldeado bastante duradero y no suponen un gran riesgo para la salud del cabello o del cuero cabelludo, y su formulación se basa en el ácido tioglicólico, solo o asociado a otros tioles y sustancias alcalinas.
Es la que se hace aplicando, en primer lugar, todo el líquido y después enrollando el cabello en los moldes adecuados. Tras el tiempo requerido, el cabello se aclara bien y se le aplica el líquido neutralizante.
Son permanentes muy suaves que logran cambios muy ligeros en la forma del cabello, empleándose en su formulación el bisulfito o sulfito de amonio, con un pH neutro en lugar de los tioles.
En este tipo de permanente se parte de la técnica del marcado con la diferencia de que se aplicará al cabello un líquido reductor.
No se utilizan con frecuencia porque requieren concentraciones altas de principios activos. Su formulación se basa en la asociación del ácido tioglicólico con otros compuestos que regulan su acción reductora, evitando el peligro que supone el exceso de tiempo de exposición.
Es la indicada para cabellos dañados o en los casos en que el profesional crea que, por el estado del cabello, es la más conveniente.