En verdes ramas nací, en molino me estrujaron, en un pozo me metí, y del pozo me sacaron a la cocina a freír.
Tengo cabeza redonda, sin nariz, ojos ni frente, y mi cuerpo se compone tan sólo de blancos dientes.
Blanco soy como la nieve, me sacan de una caña, y aunque soy del otro mundo, ahora ya nazco en España.
Vive bajo tierra, muere en la sartén, sus diez camisitas llorando se ven.