Si preguntamos al verbo ¿a quién? o ¿para quién/qué?, la respuesta es este complemento
persona, animal o cosa sobre la que recae la acción del verbo
Podemos sustituir el complemento por los pronombres le o les
persona, animal o cosa que recibe de forma indirecta el beneficio o daño de la acción
Este complemento puede coexistir con el complemento circunstancial de finalidad.
Si preguntamos al verbo ¿qué? o ¿quién?, la respuesta es dicho complemento.
Podemos sustituir por los pronombre lo, la, los, las
No tiene que concordar con el verbo en número y persona.
Es siempre un sintagma preposicional, con la preposición «a»
Suele seguir al verbo y no lleva preposición, excepto «a»
Si pasamos la oración activa a pasiva, este complemento pasa a ser el sujeto en la oración pasiva
Si pasamos la oración activa a pasiva el complemento sigue teniendo la misma función