Se puede definir como el flujo de electrones a través de un material conductor desde un cuerpo con carga negativa (exceso de electrones) a un cuerpo con carga positiva (deficitario en electrones).
Es la oposición que ofrece un material al paso de la corriente eléctrica. Se mide con el óhmetro y se expresa en ohmios (Ω).
En 1822 científico George Simon Ohm, relacionó la intensidad de corriente, la tensión y la resistencia.
La tensión entre dos puntos del circuito se mide con un voltímetro que se colocará en paralelo con el componente cuya tensión se va a medir. Esto lo podemos conseguir conectando cargas.
Su unidad, en el S.I; es el Amperio (A) que se podrá definir como la intensidad de corriente que transporta 1 culombio en un segundo.
Es el trabajo que hay que realizar para transportar una carga positiva entre dos puntos de un circuito; es decir mide el desnivel eléctrico entre dos puntos del circuito. Su unidad, en el SI es el Voltio (V).
Será la cantidad de carga (Q) que pasa por un punto del circuito por unidad de tiempo (t).
Es una propiedad intrínseca de cada material (cada material tiene la suya), que indica la dificultad que encuentran los electrones a su paso.
Se mide con un dispositivo llamado amperímetro, que se colocará en serie con el receptor cuya intensidad queremos medir.
La intensidad de corriente que circula por un hilo conductor es directamente proporcional a la tensión entre sus extremos e inversamente proporcional a la resistencia