La motivación y el interés mejoran la atención.
Tomar la decisión consciente de prestar atención.
Tener períodos de descanso, cambio de actividad, movimiento, relajación.
El sueño ayuda a mantener la atención.
Prescindir de los estímulos que pueden distraer.
Utilice todos los sentidos inclusive la imaginación.
La alimentación saludable y la actividad física, mejoran la memoria y el aprendizaje.