Había
una
vez
una
____________________
que
no
sabía
reír
;
es
más
,
ni
siquiera
sabía
sonreír
.
El
____________________
,
su
padre
,
mandó
llamar
a
varios
____________________
a
su
____________________
.
Uno
de
ellos
se
paró
de
cabeza
,
otro
le
hizo
____________________
gestos
a
la
princesa
;
alguno
le
hizo
____________________
en
la
nariz
con
una
____________________
.
Pero
no
lograron
que
____________________
se
riera
.
Cerca
del
____________________
,
vivían
una
mujer
humilde
y
su
____________________
.
El
muchacho
realizaba
sus
labores
cotidianas
de
manera
muy
especial
:
Si
su
____________________
le
decía
que
lavara
las
____________________
,
¡
las
tallaba
en
una
tabla
de
lavar
!
Pero
era
muy
simpático
,
igual
que
su
nombre
:
____________________
.
Cierto
día
,
la
madre
de
____________________
se
dio
cuenta
de
que
en
la
alacena
no
había
____________________
suficiente
ni
para
un
____________________
.
Entonces
llamó
a
su
hijo
y
le
ordenó
:
-
Tribilín
,
no
tenemos
más
que
____________________
rancio
para
la
cena
.
Ve
al
____________________
a
pedir
____________________
.
-
Está
bien
,
mamá
-
repuso
él
-
.
Así
lo
____________________
.